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HAIKUS SORIANOS

HAIKUS SORIANOS

Me despierto en un Hotel de Soria. Silvia se ha bajado a sus charlas y tengo toda la mañana soleada para pasear por la ciudad. Me compro el Heraldo en una calle peatonal. Lo tienen detrás de los ejemplares del Diario Alba. Hay veces que los quiosqueros saben hacer unas metáforas difíciles de superar. De todo el periódico sólo me interesa una noticia, se ha muerto una de las dos supervivientes del Titanic. Ahora si que se va a hundir para siempre. Me meto en un bar que se encuentra donde Antonio Machado conoció a Leonor. El edificio de 1908 que albergaba la pensión de los padres de Leonor, en la esquina de la Calle Teatinos, ha desaparecido. Hoy se levanta una casa moderna que en sus bajos comerciales tiene un bar que se llama Tito. Me sorprende que lo regenten chinos modernos. si alguien se enamora de los hijos de los dueños realizará Haikus sorianos. Me pido un cortado, la camarera  risueña y simpática intenta que lo acompañe con una tortilla de champiñones "muy rica". Declino la oferta y me pongo a leer varias páginas del excitante libro de Aloma. Entra un señor mayor con la  movilidad reducida que necesita un tacataca para desplazarse, tampoco le apetece la tortilla de champiñones.

La mañana ha adquirido un marcado tono oriental. Las hojas otoñales me hacen pensar en Japón. Recuerdo que ayer por la noche Silvia llevaba una camisa japonesa y salgo a caminar

Caminante no hay camino, se hace camino al... pensar

#La imagen corresponde a la antigua pensión de los padres de Leonor. Calle Estudios, 7 esquina con la Calle Teatinos. Soria

2 comentarios

jcuartero -

Volveremos, la próxima vez espero que sea un poco más larga. No lo dudes, me pondré en contacto contigo

DIEGO MARÍN ABEYTUA -

Querido amigo Jesús, andaba buscando tu e-mail pero no doy con él así que te pongo un post. Fue bonito conocerte y espero que volvamos a vernos. El próximo martes 20 tenemos un acto en Calahorra, no sé si coincidirás por allí. El libro de Aloma, es efecto, es buenísimo y me ha divertido mucho la desconfianza sobre tortilla de champiñones de aquel bar chino-soriano. También oí hablar sobre el empacho de aceitunas. Escríbeme. Un abrazo.